Debemos prepararla con antelación, en el momento de la misma debemos procurar evitar el estrés y inseguridad. La entrevista es diferente en función de quien la realiza. La entrevista es la más pública de las conversaciones privadas. La entrevista no es un diálogo libre: hay roles definidos: el entrevistador pregunta y el entrevistado responde; el protagonista es el entrevistado; El entrevistador debe escuchar al entrevistado e intervenir si encuentra inconsistencias o contradicciones.
Conviene contar con unas 10 preguntas posibles sobre tres o cuatro temas diferentes. Se deben usar las preguntas: ¿Quién? ¿Qué? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Por qué?. No dar por concluida la entrevista hasta estar seguros de que se obtuvo toda la información deseada.
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